Certeza
Certeza
La segunda condición de la shahaadah es la certeza o al-iaqin. Es lo opuesto de la duda y la incertidumbre. De hecho, en el Islam todo tipo de duda con respecto a algo que está confirmado en el Corán o la Sunnah equivale a kufr o incredulidad. En el corazón, uno debe estar absolutamente convencido de la verdad de la shahaadah. El corazón no debe vacilar de ninguna manera al testificar la verdad de “No existe nadie digno de alabanza excepto Allah”. Allah describe a los verdaderos creyentes como aquellos que creen en Allah y que sus corazones no vacilan. Allah dice:
“Por cierto que los verdaderos creyentes son quienes creen en Allah y en Su Mensajero, y no dudan en contribuir con sus bienes o luchar por la causa de Allah. Ésos son los sinceros en la fe.” (49 : 15)
De igual manera, el Mensajero de Allah (r) dijo:
“Quien encuentra a Allah (luego de su muerte) con el testimonio de que no existe nadie digno de alabanza excepto Allah y que yo soy el Mensajero de Allah, sin duda alguna sobre la implicancia de la frase, entrará al Paraíso”. (Registrado por Muslim).
Por otro lado, Allah describe a los hipócritas como aquellos cuyos corazones vacilan. Por ejemplo, Allah dice en el Corán:
“Ciertamente quienes pretenden evadir el combate no creen en Allah ni en el Día del Juicio; sus corazones están llenos de dudas, y por ello vacilan.” (9 : 45)
Muchos eruditos han mencionado que las enfermedades del corazón, o las dudas y sospechas que uno deja entrar al corazón, son más peligrosas para la fe de una persona que la lujuria y el deseo. Esto es así porque la lujuria y el deseo deben satisfacerse en algún momento pero la persona aún sabe que son malos. En algún momento, puede llegar a controlarlos, arrepentirse y dejarlos de lado. En cambio las dudas y sospechas pueden permanecer en el corazón, sin cura alguna, hasta que la persona termina por irse del Islam o continúa practicando el Islam, pero sin tener una verdadera fe.
Una de las mejores curas para estas dudas es el conocimiento. Un conocimiento firme del Corán y la sunnah elimina todas, o parte, de dichas dudas. Al estudiar y entender, uno puede lograr la certeza. Y cuanto más estudia y aprende la persona, más firme será su certeza.